Tijuana recuerda a Borges: Un Hombre de Genio
- Diana Arem
- 2 abr 2016
- 5 Min. de lectura

Cuando hablamos de Buenos Aires, es obligatorio recordar sus avenidas, Corrientes mi preferida, llena de vida a todas horas, con sus múltiples cafés notables, pizzerías y librerías, avenida que al cruzarse con 9 de julio, se impone su Obelisco que caracteriza a la ciudad.
Nunca terminan de sorprender las revelaciones de personalidad de los porteños, cada barrio de Buenos Aires tiene una esencia propia y una magia sin igual.
Fue en Serrano 2135, en el Barrio de Palermo, donde creció Jorge Luis Borges. En aquella casa ajardinada aprendió Borges a leer inglés con su abuela Fanny Haslam y, como se refleja en tantos versos, los recuerdos de aquella dorada infancia lo acompañarían durante toda su vida. Con apenas seis años confesó a sus padres su vocación de escritor, e inspirándose en un pasaje del Quijote redactó su primera fábula cuando corría el año 1907: la tituló La visera fatal.

Borges fue un adolescente que devoraba incansablemente la obra de los escritores franceses, desde los clásicos como Voltaire o Víctor Hugo hasta los simbolistas, y que descubría maravillado el expresionismo alemán. Fue durante su adolescencia y con motivo de la guerra, que se trasladó con su familia a Europa, en donde entabló amistad con notables escritores del viejo continente.
De regreso en Buenos Aires, en 1921 fundó con otros jóvenes la revista Prismas y, más tarde, la revista Proa; firmó el primer manifiesto ultraísta argentino, y, tras un segundo viaje a Europa, entregó a la imprenta su primer libro de versos: Fervor de Buenos Aires (1923).
Durante los años treinta su fama creció en Argentina y su actividad intelectual se vinculó a Victoria Ocampo y Silvina Ocampo; las hermanas Ocampo le presentaron a su vez a Adolfo Bioy Casares, pero su consagración internacional no llegaría hasta muchos años después.

La vida y sus vueltas de tuerca, nos permiten actualmente visitar en el barrio de la Recoleta, el Café la Biela, en donde sus asistentes, se sientan con Borges a disfrutar de un café, al abrigo de la historia de un sitio único.

Tijuana se prepara para conmemorar el 30 aniversario de la partida del inigualable escritor argentino, con dos eventos que han generado interés por parte de la comunidad:
MIÉRCOLES 6 DE ABRIL
Lectura Poética, a las 19:00 horas, con una selección de textos de dos grandes autores del siglo XX: Jorge Luis Borges y Pablo Neruda.
VIERNES 8 DE ABRIL
Conferencia El Borges cotidiano, en el marco del Ciclo México a través de la cultura, por Alifano, narrando la vida diaria del escritor con quien trabajó 10 largos años.
Según Alifano, nominado este año para el Premio Cervantes de Literatura, Borges era ante todo un poeta "que deja una obra extraordinaria, porque inclusive la prosa de Borges es poesía, es profundamente poética".
El Centro Cultural Tijuana también inaugurará el 8 de abril a las 18:30 horas, la exposición Borges inédito, integrada por 25 fotografías tomadas por Rogelio Cuéllar durante la visita del escritor argentino a México en 1973, el 90 por ciento de las cuales son inéditas.
Siendo un hombre de pasiones, letras y profunda sensibilidad, Jorge Luis Borges vive en cada rincón de Buenos Aires. Entender la historia se torna fascinante a través de sus ojos. Invitamos a los amantes de la magia de las letras, a asistir a estos eventos de gran calidad que organiza el Centro Cultural Tijuana.
Por último, me permito compartir fragmentos de una reflexión de Maria Kodama, sobre Borges:
- ¿Cómo era Borges?
- Complejo e impredecible, de una inteligencia fascinante y una imaginación incontenible. Era genial en el sentido del creador, del poeta, porque además desde chico supo cual sería su destino, intuyó que a pesar de las vicisitudes y malas jugadas su destino era ser Borges... Borges era muy divertido, lleno de vida, con una enorme curiosidad por todo. Tengo maravillosos recuerdos de la complicidad que nos unía, más allá de los momentos muy importantes en los que me dictaba su obra.
Tuvimos al inicio una relación maestro-discípula y siempre fue algo desenfadado, yo le hablaba de manera natural y espontánea, hasta me atrevía a discutirle sobre autores y asuntos que no podía sostener entonces. Pero a medida que le fui conociendo, a medida que fui descubriendo, digamos, sus misterios, el se divertía con mis ocurrencias y fue entendiendo mi carácter, nada obsecuente, como el mismo lo era, libre como un animal selvático, libre gracias a su genialidad… A su lado mi vida fue especial y maravillosa. Desde siempre he dedicado mi vida a la literatura y a estudiar y mi curiosidad por los libros sigue siendo enorme, como desde los días en que pude trabajar a su lado, y pude crecer hasta donde ahora he llegado. Fue un viaje hacia la sabiduría, una experiencia que no puede repetirse, Borges no hubo sino uno.
Para que una relación de amor sea duradera y maravillosa, la base es el respeto por la identidad. Borges decía que soy como el ojo del huracán: serenidad y silencio cuando todo se arremolina a su alrededor.
Borges era fanático de los Beatles, de los Rolling Stones, de Pink Floyd. Muchas veces fuimos a Nueva Orleáns a escuchar jazz, también le gustaban los blues y la milonga le gustaba muchísimo. Le gustaban los viejos tangos.
Borges sigue vivo, lo extraño cuando viajo, en la forma como nos divertíamos, las bromas que gastábamos, la forma de llevar nuestras vidas. Cuando uno ha amado la persona que otros siguen amando hace que uno sienta el tibio calor del recuerdo y esa compañía es muy vigorosa y cierta. Borges sigue generando polémicas porque fue un hombre totalmente libre, crítico e irónico. Nunca medraba al opinar sobre algo o sobre alguien, siempre decía lo que pensaba de las cosas, no tenía obligaciones con nadie.
Borges se reía mucho con el asunto del Nóbel. Recuerdo que un día lo detuvo un señor en la calle y le dijo: Maestro, voy a hacer una promesa a Dios para que se lo den este año, y Borges respondió: "Dios lo libre de hacer eso, si es que Dios existe. Porque si me lo dan este año seré uno mas en la ya larga lista, pero si no, me convierto en un mito escandinavo, en ese hombre que siempre se presentaba y no se lo daban, prefiero ser el mito escandinavo, el eterno aspirante".
Borges era tímido pero, como todas las personas introvertidas, muy observador de la personalidad y del alma del otro.

DIANA RODRÍGUEZ MENDIOLÉA es Lic. en Administración de Mercadotecnia por CETYS Universidad. Ha colaborado con empresas como Information Planet, Consultorio Natura y Creativa Marketing. Co-conductora en el programa de radio Mujeres Fronterizas. Fundadora del movimiento Tijuana Fights Cancer y creadora de la campaña ciudadana La Mujer Rosa en pro de la prevención y detección temprana del cáncer de mama. Curadora de la instalación de arte público Zapatos Rojos, en Tijuana. Buen oído, buena vibra, para todo hay solución y una canción, desmesuradamente optimista, perfeccionista, eterna forastera.
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